Hipermetropía: que és, causas, síntomas y tratamientos
La hipermetropía es un defecto refractivo que se manifiesta a través de una visión incómoda y borrosa de los objetos que se encuentran cerca, afectando su nitidez. Esto sucede porque las imágenes se enfocan detrás de la retina, cuando lo correcto es que el enfoque se realice sobre ella.
La hipermetropía ocurre porque el ojo de quien la sufre tiene un tamaño más corto de lo común o porque la potencia óptica de la córnea o del cristalino es menor que la usual, causando el error refractivo.
Es normal que la hipermetropía aparezca combinada con otro defecto refractivo, como el astigmatismo.
En el caso de los jóvenes y niños que tienen hipermetropía, sucede que, mientras su graduación sea baja, es posible que no manifiesten problemas de agudeza visual, ya que el defecto refractivo se compensa a través de la acomodación.
La acomodación es el proceso a través del cual el cristalino aumenta su potencia con el incremento de la curvatura y espesor por la contracción que realizan los músculos que se encargan de rodearlo.
No obstante, cuando se produce constantemente, puede causar fatiga visual, dolor de cabeza y enrojecimiento de los ojos.
En mayores de 40 años, la hipermetropía suele confundirse con la presbicia, conocida también como “vista cansada” , que es otro de los errores refractivos generados por la disminución de la capacidad del cristalino para realizar la acomodación.
A las personas que padecen este defecto refractivo – sus ojos enfocan las imágenes por detrás de la retina cuando deberían hacerlo directamente en ella, tal y como sucede en el caso de los emétropes, quienes no tienen ninguna graduación - se les denomina “hipermétropes”.
Principales Causas de la Hipermetropía
La hipermetropía está causada porque el ojo es más corto de lo común o porque la córnea es muy plana. En las personas hipermétropes las imágenes se enfocan en la parte posterior del ojo, siendo este hecho producto de la pequeña variación del tamaño del ojo.
En los individuos jóvenes la hipermetropía no suele ser muy alta. En estos casos se compensa con los músculos que del ojo, permitiendo al paciente ver perfectamente de lejos y de forma aceptable de cerca. Sin embargo, esta capacidad se va perdiendo con el paso del tiempo y con el aumento de la edad y, en consecuencia, los objetos cercanos cada vez se ven más desenfocados.
Aunque la edad no sea una causa que afecte a todas las personas que padezcan este error refractivo, sí existe una probabilidad de que a ella se deba el aumento gradual, sobre todo para aquellas que se encuentren en una edad comprendida entre los 35 y los 40 años.
Síntomas de la Hipermetropía
La hipermetropía es el error refractivo contrario a la miopía. Los hipermétropes ven mal de cerca, pero ven bien de lejos. Cuanto mayor sea la graduación, más desenfocados se verán los objetos que se encuentran cerca. Entre los síntomas mas comunes están:
- Visión borrosa de los objetos cercanos.
- Astenopía, conocida también como fatiga ocular. Se presenta mayormente en los pacientes que realizan actividades que fuerzan la vista, como aquellos que pasan mucho tiempo frente a un ordenador con alta luminosidad.
- Dolores de cabeza continuos, los cuales se presentan generalmente en la parte frontal de la cabeza. Esto se debe al esfuerzo que hace el ojo para enfocar los objetos cercanos. La mayoría de las veces estos dolores vienen acompañados de vómitos y náuseas.
- Desviación del ojo hacia el otro ojo, esto se debe a un reflejo del sistema nervioso al tratar de acomodar el órgano visual con el fin de lograr enfocar las imágenes, al cual se le conoce también como estrabismo convergente.
- Ojos rojos.
Tipos de hipermetropía
- Hipermetropía simple, es la que presentan la mayoría de los pacientes y es producto de la continuidad de la hipermetropía infantil, la cual se debe a que el ojo no creció lo suficiente. Por lo general su graduación no es tan elevada y suele corregirse con gafas.
- Hipermetropía compuesta, este tipo se produce debido al aplanamiento que presenta la córnea y al acortamiento que tiene el vítreo. Se corrige mediante el uso de gafas o con un procedimiento quirúrgico de implantación de lentes intraoculares, siempre que el paciente cumpla con los requisitos necesarios.
- Hipermetropía mixta, en este tipo se combinan los dos anteriores y se debe a que el vítreo es mucho más largo de lo que debería y la córnea más plana, o bien a que la córnea es muy curva y el vítreo más corto.
Clasificación
Esta condición tiene diferentes clasificaciones, entre las cuales se encuentran las siguientes:
- Hipermetropía con curvatura: en ella el cristalino es más plano que el del ojo emétrope.
- Hipermetropía axial, cuando el eje óptico es más corto.
- Hipermetropía con índice, en este tipo de casos, los medios del globo ocular transparentes aumentan su índice de refracción, ocasionando el error.
- Hipermetropía latente, es aquella que compensa el error con el tono del músculo ciliar del ojo.
- Hipermetropía manifiesta, es justo lo contrario de la anterior. En este caso, el tono del músculo ciliar no es compensado. Este tipo, a su vez, se divide en otros tres:
- Hipermetropía absoluta, cuando no está compensada con el esfuerzo de la acomodación ni con el tono del músculo ciliar.
- Hipermetropía facultativa, suele compensarse con el esfuerzo de la acomodación.
- Hipermetropía total, resulta de la suma de la hipermetropía absoluta y la hipermetropía facultativa. Esta es la más importante de las tres mencionadas.
Diagnóstico y Corrección: ¿La hipermetropía tiene tratamiento?
Cuando se presentan síntomas, lo ideal es acudir a un oftalmólogo, quien procederá a realizar pruebas visuales, con el fin de determinar si el paciente tiene hipermetropía. Y, de ser así, le recetará el tratamiento indicado.
Este defecto refractivo puede corregirse de tres formas: a través del uso de lentes de contacto para hipermetropía, con gafas que tengan graduación o mediante procedimientos quirúrgicos.
Operación de la Hipermetropía
La operación de la hipermetropía tiene varias alternativas y el oftalmólogo encargado recomendará la más adecuada para el paciente. Estas suelen ser la intervención quirúrgica con láser, cuyo procedimiento es de corta duración pero con un alto nivel de riesgo, y la implantación de lentes intraoculares.
Se recomienda realizar la operación de hipermetropía después de los 25 años, ya que es a esta edad cuando el error refractivo se estabiliza; es decir, las dioptrías suelen dejar de aumentar.
Cabe destacar que para la operación de hipermetropía con láser, además de cumplir con ciertos requisitos que determinará el especialista, es necesario que el paciente tenga por lo mínimo 5 dioptrías.
Astigmatismo y Hipermetropía: ¿cuál es la diferencia?
La diferencia entre astigmatismo e hipermetropía es que en el primero, la visión es borrosa y distorsionada debido a la curvatura de la córnea, sin importar si los objetos se encuentran cerca o lejos. Mientras que la hipermetropía produce visión borrosa ante los objetos de cerca, puesto que las imágenes se enfocan detrás de la retina.
La mayoría de los recién nacidos tienen hipermetropía, esto se debe a que no han desarrollado su visión. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo y crecen, esta se corrige.
Lea también: Hipermetropía Infantil
La hipermetropía infantil suele aparecer entre los cuatro y cinco años. En este momento la graduación del error refractivo no es elevada, por lo que no se detecta con facilidad.
Esto se debe a que el órgano visual del menor realiza la acomodación del cristalino, la lente natural encargada de enfocar los objetos de cerca.
Por esta razón, es necesario que a los niños se les realicen exámenes periódicos desde temprana edad. Las revisiones ayudarán para determinar cualquier error refractivo precoz, como la hipermetropía, astigmatismo o miopía.
Cuando la hipermetropía infantil se mantiene hasta la adolescencia y sus dioptrías van en aumento, el oftalmólogo valorará el uso de gafas con graduación como tratamiento principal.
Las lentes de contacto serán una alternativa si el adolescente realiza deporte o alguna otra actividad en la que el uso de gafas ocasione dificultades.
Síntomas de la hipermetropía infantil
Los niños nacen con hipermetropía, no obstante, durante sus primeros meses, este defecto se va corrigiendo a medida que el sistema visual se desarrolla.
Si no se corrige, la hipermetropía infantil debería ser detectada a una edad temprana, pues existe la posibilidad de que acabe provocando ojo vago, que es una baja visión en uno de los ojos o en ambos, así como estrabismo convergente, en cuyo caso el ojo se desvía hacia dentro debido a un estímulo del sistema nervioso.
Durante esta etapa, los padres y profesores juegan un papel primordial para detectar este error refractivo. Los síntomas más comunes que los niños con hipermetropía infantil presentan son:
- Fatiga visual.
- Ojos rojos, ojos llorosos y escozor. En estos casos, es común que el niño se frote frecuentemente los ojos, arrugue la frente cuando quiera observar los objetos de cerca o parpadee de forma excesiva.
- Por lo general el niño presenta problemas para escribir o leer.
- Dificultad para concentrarse y bajo rendimiento académico