Lentillas rígidas o blandas: ¿cuál usar?

¿Problemas de visión? Entonces, debes encontrar un método de corrección. En este punto surgen las indecisiones. La primera, ¿lentes de contacto o gafas? Si te decantas por las lentillas, aparece la segunda inquietud: ¿cuál usar? ¿Lentillas Rígidas o blandas?

Si bien hay muchas opciones, las anteriores son las categorías generales. No hay mejor o peor. Cada uno ofrece un abanico de conveniencias que se adaptan, o no, a tus necesidades. Por ejemplo, es necesario evaluar: el trastorno ocular y la forma de tus ojos.

Por esto, al final la decisión la tomará el oftalmólogo. No obstante, lo importante es que ambos son fáciles de utilizar. ¿Lo complicado? Que te comprometas a cumplir con el estricto proceso de mantenimiento.

Por esta razón, estas piezas se han convertido en una gran opción frente a los clásicos anteojos. Hay más: no se ven afectados por los cambios climáticos ni por el reflejo de las luces. Además, disminuyen el riesgo de sufrir lesiones en esta zona por accidentes.

Termina este artículo y verás que después, sabrás cuáles son las diferencias entre ellas y todo lo que debes esperar desde que las adquieres. Siempre es mejor llegar informado a la consulta con el especialista.

Lentillas blandas (SCL)

La particularidad de este tipo de lentes de contacto está en su tamaño. Y es que son más grandes que la córnea, por lo que se fijan en el iris. Otra cosa que sorprende a muchos es la textura. Como lo dice su nombre: son blandas, pero también gomosas o elásticas.

Esto se debe al material de fabricación: hidrogel en cuyo interior hay líquido. ¿Algo más? Es agua extraída de lágrimas naturales. Debido a esto, no suelen estar indicadas ni para quienes sufren de ojo seco, ni para pacientes con problemas en sus glándulas lagrimales.

Ventajas de las lentillas blandas

Por lo general, la adaptación no requiere mucho tiempo. Se colocan de forma rápida y sin dificultades.
Son blandas. Esto le aporta mayor flexibilidad, sin duda esta es una característica importante porque permite que se adapten a muchos problemas de la vista.
No se notan en el ojo y no molestan al parpadear. Resulta ser un molde con mayor adaptabilidad a la zona, por ser suave y ligero.
No se desprenden ni se desplazan, porque se acomoda a la curvatura del ojo. En este sentido, hay menos riesgo de que la córnea sufra deformaciones.
Aporta mayor lubricación. La humedad y oxigenación del ojo es gracias a su base de gel.
La calidad de tu visión dependerá de cuán hidratada esté la lentilla. Por ejemplo, debes estar atento cuando te encuentres en ambientes secos o si produces lágrimas en poca cantidad y calidad.
Existen muchos tipos según la frecuencia de uso. Existen modelos para usar solo una vez, mientras que otras se reemplazan de forma anual. De cualquier modo, por cuestión de higiene, es recomendable suplirlas continuamente.

Desventajas de los lentes de contacto blandos

Duran mucho menos que las lentillas rígidas.
Con frecuencia es posible que haya problemas de nitidez.
Es recomendable que los reemplaces a menudo.
Muchas personas terminan rasgando el material, así aumenta el riesgo de que llegue poca cantidad de oxígeno a la córnea.
No es extraño que se produzca alguna reacción alérgica.
Hay que limpiarlos de forma rigurosa. En algunos casos, el mantenimiento suele ser costoso, ya que tienden a ensuciarse muy rápido.

¿Para quiénes están indicadas las lentillas blandas?

¿Astigmatismo, miopía, presbicia o hipermetropía? Si sufres alguno de estos defectos refractivos, entonces eres candidato. Además, se recomiendan para quienes a penas empezarán a usar lentillas y para los deportistas de alto impacto.

Razones para elegir lentillas blandas

Son muy versátiles para quienes deben usarlas por primera vez. Usualmente, la rigidez y duración de las lentillas duras, crean desconfianza en estos pacientes novatos. Por otro lado, se ajustan a la estructura del ojo con más facilidad.

Claro que duran menos que sus otros pares, sin embargo, encontrarás reemplazo mucho más rápido. Si bien, como compensación a la comodidad y frescura que aportan, es necesario limpiarlos con detenimiento, no es difícil dejarlos impolutos.

Lentillas rígidas (RGP)

También las consigues como duras o rígidas permeables a los gases (RPG). Por naturaleza, nuestra córnea es más grande que el diámetro de cada una de estas piezas. En primera instancia, lo que las caracteriza es que son duras al tacto y, por lo tanto, poco flexibles.

Esto responde al material de fabricación: plástico rígido. Por ende, cuanto más flexible, serán más permeable y permitirán pasar más cantidad de oxígeno al ojo. Adicionalmente, de esto también depende cuán delicadas resultan durante la manipulación.

Ventajas de los lentes de contacto rígidos

Los costos de reemplazo se ven disminuidos gracias a que duran más.
Al ser permeables a los gases, no hay problemas con la visión nítida.
Son eficaces para quienes tienen el síndrome de ojo seco, pues producen poca sequedad ocular.
Son una excelente opción si la forma de tu ojo es única.
Permiten una buena oxigenación para los ojos.
Son aptas para corregir cualquier graduación. Hasta quienes tienen altos rangos de astigmatismo son excelentes candidatos.
No se voltean, así que no tendrás problemas para manipularlos.
También los recetan en casos de deformaciones de córnea.
No provocan infecciones.

Desventajas de las los lentes de contacto rígidos

No son tan cómodos como las lentillas blandas.
La adaptación, por lo general, es lenta. Incluso, posiblemente te lleve unas dos semanas.
Tras movimientos bruscos, se pueden caer del ojo o quedar atrapados bajo el párpado.
La córnea puede sufrir deformaciones temporales.
Es probable que molesten, si hay viento fuerte.
Hay muchas posibilidades de que debajo de ellos se acumulen partículas de polvo, lo que causa incomodidad.
La tendencia señala que son propensos a que reciban rasgones.
Si practicas deportes de alto impacto, es recomendable que no los uses.
Debes limpiarlos diariamente en dos pasos.

¿Para quiénes están indicadas las lentillas rígidas?

Es normal que los pacientes con problemas de visión prefieran lentillas blandas. No obstante, las rígidas son grandes aliadas en muchos casos. Por ejemplo, los especialistas suelen recomendarlas si padeces de ametropía o queratocono.

Este es un trastorno que se caracteriza por alterar la forma original de la córnea. Te preguntarás cuál es ese nuevo aspecto. Bueno, se asemeja a un cono. Para solucionarlo, recetan estas lentillas. ¿La razón? Corrigen la superficie del órgano y optimizan la visión.

De igual manera, quienes sufran de ojo seco, leve o moderado, sentirán mayor comodidad con una de estas, pues captarán los objetos de forma más nítida y clara. Por otra parte, los niños tienden a conseguir una graduación más estable que con anteojos.

Razones para elegir lentillas rígidas

La principal razón es que no es necesario reemplazarlos tan seguido. Destacamos la durabilidad. De hecho, la vida útil suele ser de unos dos años. Por esto, además de su limpieza diaria, requerirán que en una de tus citas al oftalmólogo se realice una revisión.

Si los problemas de corrección son agudos y muy específicos, estas lentillas son las ideales para ti. Entre tanto, la permeabilidad inherente a este tipo de lente es sinónimo de seguridad para tus ojos, pues permiten que llegue el oxígeno necesario para mantenerlos saludables.

Si tu córnea tiene forma irregular, opta por unos RGP, pues se ajustarán a tu condición. De esta forma, le estarás dando la mejor solución a este problema: corrección a tu visión y, en general, un acoplamiento perfecto que trae consigo frutos a largo plazo.

Si bien dijimos que es frecuente la acumulación de polvo debajo de estas lentillas, esto representa un inconveniente menor. Y es que la superficie lisa está diseñada para no retener ni absorber agua ni desechos. Esto significa que son saludables, limpias y seguras.

¿Cuáles son las mejores lentillas para ti?

Como ves, con un cuadro clínico de defectos refractivos lo más seguro es que tu oftalmólogo recete lentillas. Dispositivos médicos a los que, por cierto, solo tienen acceso quienes tienen la recomendación del especialista.

En realidad, la elección de los lentes de contacto indicados para ti no depende de tus preferencias sino de los resultados de la evaluación que realice el experto. Claro que tomará en cuenta tu opinión, pero prevalecerá la dimensión de tu caso y el estilo de vida que llevas.

En cuanto a este punto, debes hablarle sobre las actividades que disfrutas, la calidad de tu alimentación y, lo más importante, cuáles son tus necesidades visuales. Otro aspecto que influye en esta determinación es la cantidad de lágrimas que produces. ¿Es suficiente?

Profundicemos más sobre esto: ¿son de buena calidad? ¿Hay afecciones secundarias que empeoran el panorama? Después de obtener estas respuestas, estará listo para dar su veredicto. Y tú debes estar preparado para acatar la medida y mejorar tu salud visual.

El objetivo será corregir o paliar los efectos de este trastorno ocular que te aqueja y buscar que durante el proceso te sientas cómodo. Entender cada una de estas etapas, permitirá que seas consciente de la complejidad y responsabilidad de elegir la mejor lentilla para ti.

Descubre las marcas de lentejas de calidad que tenemos en nuestra tienda online.