¿Por qué dormimos con los Ojos Cerrados?
El proceso comienza en el hipotálamo, estructura cerebral que libera sustancias para disminuir la frecuencia cardíaca y respiratoria. Con los ojos cerrados, las señales luminosas dejan de llegar a la retina y al cerebro.
Durante el sueño, el cerebro procesa las memorias y se concentra en la reparación física y mental. Cerrados, los ojos son lubricados para prevenir la sequedad o empañamiento de la córnea, que capta la luz convertida en imágenes en el cerebro. La sequedad puede ocasionar serios daños a la salud ocular.
Es prácticamente imposible dormir sin cerrar los ojos, pero existen situaciones en que esto sí sucede. Secuelas de parálisis facial o defectos en los músculos de los párpados, relativamente raros, pueden impedir o dificultar este proceso.
- El cerebro envía hormonas al corazón, reduciendo los latidos, haciendo lo mismo con la frecuencia respiratoria y el tono muscular.
- Con la musculatura de los párpados relajados, la sensación es que los ojos van quedado cada vez más pesados hasta que se cierran.
- Con los ojos cerrados, la luminosidad no llega al cerebro. Y la glándula pineal comienza a liberar melatonina, una de las hormonas más importantes del sueño.
- Bajo los párpados cerrados, ocurre la lubricación del globo ocular, efectuada por las lágrimas, protegiendo el ojo de la sequedad y de otros problemas.